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Incluir protección solar en tu rutina diaria de belleza ya no es una opción, sino una necesidad. La exposición continua a la radiación solar, incluso en días nublados o frente a la pantalla del ordenador, acelera el envejecimiento cutáneo y aumenta el riesgo de manchas y otros daños en la piel.
La buena noticia es que existe una solución fácil, eficaz y muy cosmopolita: la crema de día con protección solar. Un gesto único que combina hidratación, tratamiento y escudo solar. Pero ¿cuál elegir? Aquí te damos todas las claves para dar con la ideal según tu piel y tu estilo de vida.
¿Qué es una crema de día con protección solar?
Una crema de día con protección solar es mucho más que una hidratante. “Una crema de día con protección solar es un producto hidratante facial formulado con filtros solares (SPF) que protege la piel frente a los efectos nocivos del sol, al tiempo que aporta hidratación y, en muchos casos, activos antioxidantes o antiedad», explican Marta Barrero y Elena Ramos, farmacéuticas, expertas en dermocosmética, directoras de The Secret Lab y portavoces de Druni.
«Su principal ventaja es que combina tratamiento y protección en un solo gesto, ideal para simplificar la rutina diaria de cuidado facial”, añaden las expertas.
Beneficios de usar una crema de día con factor solar
¿Te parece poco con proteger la piel del sol? Hay más motivos para enamorarte de este tipo de cremas. “Protección frente al fotoenvejecimiento, es decir, el SPF ayuda a prevenir arrugas, manchas y pérdida de elasticidad causadas por la radiación UVA y UVB. Además, actúa de prevención del cáncer de piel. La protección solar diaria reduce el riesgo de queratosis actínicas y carcinomas», señalan las expertas.
«Efecto hidratante y calmante. La mayoría están formuladas con ingredientes humectantes y calmantes, como ácido hialurónico o aloe vera. Comodidad y ahorro de tiempo, para quienes buscan eficacia con pocos pasos”, añaden.
Factores a considerar al elegir una crema hidratante con protección solar
Nivel de protección solar (SPF)
La regla de oro es adaptar el nivel de SPF a tu estilo de vida y tipo de piel. “SPF 30 como mínimo. Para exposiciones prolongadas, pieles claras o fotosensibles: SPF 50 o superior. Asegúrate de que el producto ofrezca protección de amplio espectro (UVA + UVB)”, recomiendan Barrero y Ramos.
Tipo de piel y tiempo de exposición
¿Seca, grasa, mixta o sensible? Cada piel tiene necesidades específicas y texturas más adecuadas:
- “Piel seca: busca fórmulas ricas en ingredientes emolientes (manteca de karité, glicerina).
- Piel mixta o grasa: opta por texturas oil-free o gel-crema, con acabado mate.
- Piel sensible o con rosácea: mejor filtros físicos (minerales) y fórmulas sin perfume ni alcohol.
- Piel madura: combínala con activos reafirmantes como péptidos o vitamina C”, explican las portavoces de Druni.
Necesidades específicas de la piel
La cosmética actual permite ir más allá de la hidratación básica. “Antiedad, antimanchas, luminosidad… Elige productos con ingredientes complementarios a tu tratamiento: niacinamida, ácido hialurónico, antioxidantes o prebióticos”, añaden las farmacéuticas.
Las mejores cremas hidratantes faciales con protección solar
¿Buscas una opción que cumpla con todo lo anterior y que puedas encontrar fácilmente? Estas son algunas opciones destacadas disponibles en Druni.es:
Para piel grasa
Para piel grasa: La Roche-Posay Effaclar Duo+ SPF30, con textura ligera y acabado mate.
Con efecto antiedad
Con efecto antiedad: Sensilis Fotocorrector Spf50+, con Alfa-bisabolol, Extracto de Physalis Angulata y de Grano de Avena Sativa, con acción reafirmante.
Para pieles sensibles
Para pieles sensibles: Avène Sunsistick Ka Spf50+, con antioxidantes y Vederine™, un activo que aumenta la expresión de los receptores de vitamina D y refuerza la barrera cutánea.
Cómo aplicar correctamente la crema facial con protección solar
¿Se podría prescindir ya de un protector solar después de la crema con SPF? Aunque estas cremas están diseñadas para el día a día, no sustituyen del todo a un fotoprotector tradicional en ciertos contextos.
“Aunque las cremas de día con SPF son útiles, no sustituyen a un protector solar tradicional si la exposición solar es directa o prolongada (playa, montaña, deporte al aire libre)», cuentan las expertas.«Es decir, para uso urbano y diario, una buena crema de día con SPF 30 o 50 es suficiente. Pero si vas a exponerte al sol de forma intensa o durante horas, suma un fotoprotector específico para reforzar la protección y evitar daños acumulativos”, aclaran las expertas de The Secret Lab.
Un último consejo: aplícala cada mañana sobre la piel limpia, antes del maquillaje, y reaplica si vas a pasar muchas horas al aire libre.
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Preguntas frecuentes (FAQs)
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¿Qué es una crema de día con protección solar?
Es una hidratante facial formulada con filtros solares (SPF) que protege la piel de los efectos nocivos del sol, mientras hidrata y, en muchos casos, incorpora ingredientes antioxidantes o antiedad.
¿Una crema con SPF puede sustituir al protector solar tradicional?
Sí para el uso urbano diario. No en casos de exposición directa o prolongada al sol (como playa, montaña o actividades al aire libre), donde se recomienda aplicar un protector solar adicional.
¿Qué pasa si no uso protección solar a diario?
Tu piel estará expuesta al daño solar acumulativo, lo que acelera el envejecimiento, la aparición de manchas y aumenta el riesgo de cáncer de piel.
¿Qué pasa si solo uso maquillaje con SPF?
El SPF del maquillaje no suele ser suficiente ni se aplica en cantidad adecuada para una protección efectiva. Es mejor usar una crema hidratante con SPF como base.