Repelentes para bebés: lo que debes saber antes de usar

Cuando llega el buen tiempo, también lo hacen los mosquitos. Y aunque una picadura puede parecer algo menor, en el caso de los bebés y niños pequeños puede convertirse en un problema serio.

La piel de los más pequeños es mucho más sensible, y su sistema inmunológico aún está en desarrollo, por lo que elegir el repelente para bebés adecuado es fundamental para protegerlos sin riesgos. Te explicamos qué ingredientes son seguros, cuáles evitar y cómo aplicarlos correctamente.

Cómo elegir un buen repelente de insectos para su niño

Según la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), solo algunos ingredientes están autorizados para su uso en menores, y no todos los repelentes del mercado son aptos para bebés. Aquí tienes una guía rápida sobre los principios activos más comunes.

DEET

Es uno de los más utilizados y con mayor respaldo científico. La AEMPS autoriza su uso en niños a partir de los 2 años, siempre en concentraciones inferiores al 20%. Aunque en otros países se permite desde los 2 meses, en España se recomienda mayor precaución. Es eficaz durante varias horas, ideal si vas a zonas de riesgo o en escapadas al campo.

Picaridina

También conocida como icaridina o KBR 3023, es una alternativa eficaz y con menos olor que el DEET. A partir de los 12 meses, puede utilizarse con seguridad si el producto está registrado como biocida y cumple los requisitos de la AEMPS. Su duración de acción puede llegar a las 8 horas, dependiendo de la concentración.

Aceite de eucalipto limón

De origen vegetal, este ingrediente (cuyo nombre técnico es PMD) tiene buena eficacia, pero no debe utilizarse en menores de 3 años, según las autoridades sanitarias europeas. Puede causar irritaciones en pieles muy sensibles, por lo que se debe probar en una pequeña zona antes de usar.

Consejos para elegir un repelente de insectos para su hijo y aplicárselo

Elegir el mejor repelente para bebés implica algo más que mirar la etiqueta. Aquí tienes algunos consejos clave para aplicarlo con seguridad.

Qué debe hacer:

  • Asegúrate de que el producto esté autorizado por la AEMPS y especifica la edad mínima de uso.
  • Aplícalo solo en la piel expuesta, nunca debajo de la ropa.
  • Rocíalo en tus manos y luego extiéndelo sobre la piel del bebé, especialmente en zonas como piernas y brazos.
  • Lava la piel del niño con agua y jabón cuando ya no haya riesgo de exposición.
  • Viste al bebé con ropa ligera de manga larga y colores claros, especialmente al amanecer y al atardecer.

Qué NO debe hacer:

  • No apliques el repelente en manos, ojos, boca ni sobre cortes o zonas irritadas.
  • No uses repelentes con protector solar incorporado: pueden producir una sobreexposición al producto químico.
  • No apliques el repelente más veces de las indicadas por el fabricante.
  • No permitas que los niños se apliquen el producto por sí mismos.

Repelentes naturales de insectos

El auge de lo “natural” ha llevado a muchos padres a optar por repelentes a base de citronela, lavanda o aceites esenciales. Pero ojo, natural no siempre es sinónimo de seguro o eficaz.

Muchos de estos productos no están registrados como biocidas y su protección es muy limitada. Si decides usar uno, asegúrate de que tenga autorización oficial, y observa si causa alguna reacción cutánea.

En bebés menores de un año, lo más recomendable es combinar protección física (mosquiteras, ropa adecuada) con un uso muy limitado de repelentes.

¿Qué debo hacer si mi hijo tiene una reacción a un repelente de insectos?

Si tras aplicar un repelente para bebés notas enrojecimiento, sarpullido o irritación, lava la zona con agua tibia y un jabón suave. Suspende su uso de inmediato. En caso de síntomas persistentes, como inflamación o picor fuerte, consulta al pediatra. Y si aparece fiebre, dificultad para respirar o urticaria generalizada, acude a urgencias.

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Preguntas frecuentes (FAQs)

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¿Por qué es importante elegir un buen repelente de insectos para bebés?

Los bebés tienen la piel más sensible y un sistema inmunológico en desarrollo, lo que los hace más vulnerables a los efectos de las picaduras de mosquitos y de los repelentes de insectos. Elegir un repelente adecuado es esencial para protegerlos sin riesgos.

¿Cuándo se puede usar DEET en bebés?

DEET se puede usar en niños a partir de los 2 años, siempre que la concentración sea inferior al 20%. Aunque en otros países se permite su uso a partir de los 2 meses, en España se recomienda mayor precaución.

¿Es seguro usar aceite de eucalipto limón (PMD) en bebés?

El aceite de eucalipto limón es eficaz, pero no debe usarse en menores de 3 años debido a posibles irritaciones en pieles sensibles. Si decides usarlo, realiza una prueba en una pequeña zona de la piel antes de aplicarlo de forma más amplia.

¿Es recomendable usar repelentes en bebés menores de un año?

En bebés menores de un año, lo más recomendable es usar protección física, como mosquiteras y ropa adecuada. Si decides usar un repelente, debe ser de forma muy limitada y solo si el producto está autorizado para esa edad.

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